Final sin perdices pero "de plato en las narices"
—Gorka.
—Dime.
—¿Adónde vas?
—Hacia adelante como los de Alicante.
Acto seguido Gorka se fue marcha atrás como los cangrejos. Arancha lo seguía de frente a él ya que éste iba marcha atrás. Se sonrió. Negó con la cabeza y esperó a ver si Gorka decía algo. Pero vio que se iba a chocar contra unas cabras, y ya fueron la semana pasada al hospital porque un cabrón lo elevó por los aires de una cornada. Y no era plan de volver a ir porque no lo avisase. Así que Arancha acalló su voz pifia de dejar que Gorka visitara de nuevo al Dr. Caprecio y volver a hacer un docudrama de la misma situación que pasa todos los días, aburre. Así que, como conocía la tozudez de Gorka por hacer siempre lo contrario de lo que le decían hacer o decía hacer, decidió salvarle de una nueva faena.
—¿Y por qué no vas al río de espaldas para que no te cales los vaqueros?
Pero Arancha se quería divertir un poco, al menos, iría de frente.
—Porque prefiero ir campo a través.
Y entonces Gorka se giró bruscamente a unos pasos de las cabras y enfiló hacia el río, poco profundo. Comenzó el chapoteo al irlo a cruzar, pero Arancha no quería mojarse, llevaba unos pantalones nuevos y si los fastidiaba el primer día su abuela le regañaría lo que no está escrito. Así que fue astuta de nuevo y le dijo:
—Oye Gorka, no pienso cruzar el río que me calo los pantalones.
—Pues yo no te pienso llevar en brazos— se sonrió mientras miraba a Arancha, con los brazos en jarra. Y sin dudarlo, unos instantes después la llevaba en brazos, atravesando el río.
Continuaron por una senda cerca del pueblo: Arancha diciéndole cosas que no hacer y Gorka haciendo todo lo contrario, como de costumbre. Entonces una avispa se posó en la cara de Gorka. Y a Arancha que le daban pánico le gritó:
—GORKA, ¡no te muevas que ésas pican!
—Pues no pienso hacer nada, entonces.
Y el tozudo de Gorka fue a cazar la avispa estampando su mano contra sí mismo.
Aprendemos de esto, queridos y queridas lectoras que no hay que ser como Gorka, salvo que quieras darte literalmente en las narices, que se te hinche la cara por burro y tozudo y hacer todo lo contrario sólo porque te sale de ahí. Al final con cabrón y sin cabrío, al hospital que se fueron derechitos: la una por pánico tremendo, el otro por estúpido.
- Formato: Microrrelato.
- Temática: Libre.
- Personaje/s: Gorka un hombre que siempre hacía todo al revés de lo que se decía, por rebeldía, como un acto reflejo.
- Escena/s explícitas dentro del relato*: Gorka dándose en las narices por terco.
- Apodo: Megawat "dicho a la alemana": /Megavat/.
- Fecha límite: 06/05/2020.