Piénsatelo.
Los engaños alimentan a los
engañados;
aunque la verdad se tape la boca para disimularlo,
se ven las
intenciones en las acciones, en los actos.
Porque
las acciones nos definen, más que las palabras.
Pero cómo actúe cada uno es
cosa de elección, azar y la toma de decisiones.
Piénsatelo dos veces antes de hacer algo.