La Flauta de Hamelín, disponible también para las ratas
Todo lo que diga puede ser usado en mi contra ante un tribunal pero es meramente informativo, y más cierto que mi nombre no artístico. Pero soy mucho de tocar la flauta a ver si suena como la de Hamelín. No porque atraiga a ratas, no, sino por ver si suena en algún concurso el nombre real tras Zentauri y si no, paciencia y barajar, y a seguir.
¿Por qué te cuento esto? No sé, lo he pensado antes hablando con La Madre de Guille hay concursos que cada año abren sus puertas a jóvenes (y no tan jóvenes) promesas. Y a todos los que llevo presentándome, todos son o bien no ganados o seleccionados para una u otra antología.
No es por ser chula, para eso ya está mi abuela, pero varias son antologías que ni conozco porque o bien no las compro o porque no las sigo. Un saludo a todas ellas, eh, que no falto al respeto con lo que hacen, que fomentar el escribir, el leer y el documentarse para realizar la primera acción es para mi una buena acción.
Pero, como quien te vende la moto, yo he venido como Umbral a hablar de mi libro. Y hago todo un texto para decirte que a partir de ahora los escritos que haga para concursos y con los que no suene la flauta, se publicarán bajo la etiqueta de La Flauta de Hamelín.
¿Podemos decir que es un cementerio de ideas que no llegaron a su fin? Sí...y no. Porque todo suma en positivo. Es parte de mi 'acumule literario' visto desde otra perspectiva, ¿no crees?
En fin, que no te quería robar más tiempo. Sólo era eso. Algo informativo. Y aprovecho para decirte que ya tienes disponible la palabra del día de hoy.
¿Has visto qué manejo? Dos en uno. De nada. Ten buen día.