Lista de la compra
Que no se me olvide...,
apuntó en su memoria perdida:
hay que comprar lo siguiente,
pero, ¿cómo me voy a acordar de comprar...?
enfiló, camino al súper,
pero como tiene tan mala memoria,
se olvidó a qué iba realmente,
y en vez de comprar en el súper, atracó el banco de la esquina.
Y salió de nuevo en el noticiario,
pero a Ourelio Olvidos ya se le conoce en el barrio.
Así que por mucha lista de compra que un humano se prepare,
luego puede pasar cualquier caso.
Así que cuidado, si ves a Ourelio Olvidos pasar por tu lado,
recuérdale que va a comprar siempre que baje al barrio,
porque es capaz de atracar otro banco la próxima semana.
Y es que tiene a los banqueros agotados,
cada dos semanas un sustaco...
apuntó en su memoria perdida:
hay que comprar lo siguiente,
pero, ¿cómo me voy a acordar de comprar...?
- Los HUEVOS, bueno, huevos no, huevazos que tiene mi compañera de trabajo, cada vez que hemos de hacer algo,
- La mala LECHE que me trae ver a siempre las misma gente haciendo las mismas estupideces,
- La HARINA que se esnifa el vecino de enfrente; a ese hombre le pasa algo, se le nota en la pesadumbre que se plasma en su triste frente,
- Los YOGURES blancos sin azúcar, como la naturalidad de esa chica que se dirigió a mí como un ser normal, desde el primer día,
- El ACEITE DE OLIVA, como la piel tersa de la mujer que cuida al abuelo loco del Octavo,
- La PASTA como la que me debe desde no sé cuándo el colega de turno, siempre el mismo...
- El PAN, ayy, sí soy yo un cacho pan, siempre con la esperanza de que me lo vuelva a devolver después de dos días...,
- El PAVO, y no es Acción de Gracias, y si encuentro un pavo bueno, da gracias, porque el carnicero...qué malas pulgas tiene, y peor pieza que te da si te tiene cruzado...,
- El PAN RALLADO, que ya me raya la verdad tener que aguantar a la cajera de turno si voy ahora a las tres al súper...,
- Oh, y VERDURAS, que aunque sea de lo que come el grillo, como se coma poquillo luego explícaselo tú al baño, y después al fontanero... ¡Y más líos no quiero, eso es un marrón enorme!
enfiló, camino al súper,
pero como tiene tan mala memoria,
se olvidó a qué iba realmente,
y en vez de comprar en el súper, atracó el banco de la esquina.
Y salió de nuevo en el noticiario,
pero a Ourelio Olvidos ya se le conoce en el barrio.
Así que por mucha lista de compra que un humano se prepare,
luego puede pasar cualquier caso.
Así que cuidado, si ves a Ourelio Olvidos pasar por tu lado,
recuérdale que va a comprar siempre que baje al barrio,
porque es capaz de atracar otro banco la próxima semana.
Y es que tiene a los banqueros agotados,
cada dos semanas un sustaco...
[Inktober de Poemas: "Mnemotecnia"]