D-FI (cción)
A pesar de la inmensidad de características a las que me
quiero enfrentar con esta breve reflexión, casi crítica, pero que tiende más a
lo objetivo-descriptivo, es de gran interés con su toque, claramente, 'mágico'
que presenta. El tema que expondré a continuación versa sobre los sistemas
mágicos de los mundos fantásticos.
La verdad es que hasta ahora no me los había ni puesto
en cuestión, pero analizar un sólo modelo mágico, y que a partir de éste se
quiera dar una visión de sus pros y sus contras, sería caer en la
generalización, y tampoco quiero caer en ese error. Pero entonces, se
preguntará, ¿qué sistema mágico de un mundo fantástico elegir? Y ésa es otra:
¿qué mundo fantástico seleccionar?
¿Quizás los de magia y brujería, con su propio
ambiente cargado de pociones, latinajos que suenan a lenguaje extraterrestre,
que sólo los entendidos manejan y que invocan con hechizos y juramentos a seres
y bestias de otros mundos, o engatusan a reptiles viperinos? ¿Los mismos que
sin la realidad actual en la que vivimos no podrían existir puesto que
necesitan de esta realidad para fomentarse y formarse a partir de los cimientos
de nuestro mundo; pero que tanta afición, interés y deseo crea en sus
seguidores por la acción que muestra entre sus aconteceres?
¿O mejor... aquellos de elfos, ninfas, enanos, o los
de gnomos, o los de poderes fantásticos de superhéroes trajeados con problemas
psicosomáticos y vida de pasado oscuro; con sus guerras apocalípticas, sus 'bestiadontes',
alados o sin alar, escamados o sin desescamar, en tramados o ficticios o de
carácter real, o sus treguas y malas tretas por conseguir la corona del rey o
la reina? ¿Qué tipo de mundo fantástico? ¿Cuál?
Difícil la elección, al parecer. Pero en general todos
tienen un espacio envolvente, con una órbita de detalles que argumenten el porqué
de cada acontecimiento y acción y personaje que se entromete, con cada
trasfondo y puerta trasera a cada aventura de cada personaje que interpreta un
papel, que el autor o autora de tal pieza maestra enmascare con un misterioso
aura que lo haga atractivo al lector. También podríamos decir que cada mundo
fantástico si bien no bebe de los grandes constructores de mundos del estilo,
se fijan en. O si no, qué mejor ejemplo que la realidad que vemos, "me
dirás que no, Alicia." Tienen como buen escudo y fortaleza la creatividad
con cada toque personal en cada universo: unos más coloridos, otros más
complejos. ¡Pero siempre hay un punto en la historia en el que te la traman! Y,
¿cuál es la amenaza de todo esto? Claramente, para aquellas personas que no
sepan discernir la verdad de lo que ellas hablan: amenazan con confundir la
real '-idad' con la ficticia.
Pero esta reflexión, breve y propia, no pretende
abarcar todo ni todas. Así que aquí dejo mi opinión expresa. Un DAFO grosso
modo sin casi delimitación ni especificación puesto que el mundo mágico es
inmenso, no. Es un universo. Y de momento yo sólo he orbitado alrededor de él.
Bien que en algunos planetas de ficción me haya propuesto embarcarme 'a mar
adentro', pero sin conocimientos de ruta, prefiero esperar a conocer y saber
poco a poco, milla a milla más a aquello a lo que me enfrento.
Gracias.
Cuaderno de Vic-tácora, 22 del Nueve
del dos-cero-uno-ocho, corto y fuera.
Kyku me retó con...
- Reflexión sobre "Los sistemas mágicos de los mundos fantásticos"
- Fortalezas, Debilidades e Inconsistencias (D-FI)
- Fecha límite: 29 de septiembre